Publicar fotos o momentos de sus hijos en Internet presenta riesgos importantes para su privacidad y su futuro digital, y es fundamental que se cuestione. Este fenómeno, que se define como «compartir» mediante la combinación de los términos compartir y paternidad, consiste en compartir imágenes e información personal de los niños de manera frecuente y a menudo excesiva en las redes sociales, y puede tener varias implicaciones negativas. Los principales riesgos de compartir datos son: - La violación de la privacidad y la confidencialidad de los datos: los niños tienen derecho a la protección de sus datos personales, tal como se consagra en la Convención sobre los Derechos de los Niños y los Adolescentes y en el RGPD. El intercambio no autorizado implica la pérdida de control sobre la identidad digital, con posibles consecuencias incluso a largo plazo.- Impacto psicológico: los niños, al crecer, pueden verse expuestos públicamente en momentos de vulnerabilidad o con imágenes íntimas subidas sin su consentimiento, lo que genera angustia psicológica y pérdida de confianza en los adultos.- Uso indebido de imágenes: las fotos inocentes se pueden guardar, modificar y reutilizar en contextos inadecuados, incluida la creación de material pornográfico infantil o como herramienta para la solicitación en línea.- Riesgos del ciberacoso y la sextorsión: La exposición digital amplía las posibilidades de acoso y chantaje a partir de imágenes compartidas o información personal.
Pregúntese siempre: ¿Estaría feliz mi hijo de ver esta imagen dentro de diez años? Evite mostrar detalles personales, lugares frecuentados o momentos de vulnerabilidad. La red puede ser un espacio de conexión, pero la protección parte del respeto.Recomendaciones para compartir de manera consciente- Evite los detalles demasiado personales, los lugares frecuentados, las rutinas, los momentos de vulnerabilidad, los momentos íntimos como el baño.- Mantenga una actitud respetuosa hacia la privacidad y el derecho de los niños a la identidad digital.- Prefiera herramientas que anonimizan o puedan limitar la circulación de imágenes- Hable también con abuelos, amigos y familiares para llegar a un acuerdo sobre qué compartir y cómo.