Según las directrices del Ministerio de Salud, el parto en casa puede ser una elección consciente para quienes experimentan un embarazo fisiológico, sin complicaciones, con un solo hijo en posición cefálica y sin ningún factor de riesgo. Siempre debe realizarse con comadronas cualificadas, en contacto con un hospital de referencia dispuesto a intervenir en caso de necesidad. Se planifica ya durante el embarazo, con una evaluación clínica precisa y la provisión de herramientas de emergencia por parte de los profesionales que la gestionan. En Lombardía, el parto en el hogar no está cubierto por el Servicio Regional de Salud: los costos corren a cargo de la familia y varían según el equipo y los materiales necesarios. En otras regiones, hay un reembolso parcial o total de los gastos de los embarazos de bajo riesgo. Se recomienda consultar al consultorio o al médico remitente para evaluar las ventajas y desventajas y elaborar un plan de seguridad personalizado.
Elija siempre profesionales inscritos en los registros oficiales, que sigan los protocolos del Ministerio de Salud y la OMS: el parto domiciliario es seguro solo si también está bien planificado. Tenga cuidado con quienes desalientan la confrontación con los médicos o minimizan los riesgos: el parto en casa es una experiencia posible, si se guía por la competencia, la prudencia y el respeto por la evidencia científica.